Restauración de la torre fósil

Entre los primeros meses de 2010 y finales de 2011, Semat supervisó la restauración de tres torres fósiles en el sitio de producción de Ilva Taranto. Mediante el diseño de andamios que cuelgan de la estructura, utilizando una arquitectura de estante para evitar la caída del material, fue posible llegar a las torres de hormigón armado de 60 metros de altura. Gracias a esta solución técnica, ha sido posible mantener en funcionamiento las plantas de producción de coque durante las operaciones de restauración.

En primer lugar, se completó la limpieza del muro de hormigón armado, preparándolo para la restauración utilizando morteros especiales elevados a 60 metros de altura a través de un sistema de bomba. Posteriormente, la torre se cubrió con materiales resistentes a la intemperie para garantizar una mayor durabilidad y conservación de la estructura a lo largo del tiempo.